En Puebla, la infraestructura de carga para vehículos eléctricos avanza a un ritmo mucho más lento que la adopción de este tipo de unidades.

De acuerdo con datos del INEGI, hasta el primer semestre de 2025 circulan en la entidad 2 mil 529 vehículos eléctricos, mientras que solo hay 127 estaciones de carga registradas, de las cuales al menos el 40% no están en funcionamiento.

Esto significa que actualmente solo operan 76 estaciones, lo que representa una proporción de 33 vehículos por cada cargador disponible.

Esta situación ha comenzado a generar molestias entre los usuarios, quienes enfrentan demoras e incertidumbre para recargar sus autos.

La red pública apenas podría abastecer a 456 vehículos por día, dejando a más de 2 mil unidades sin acceso efectivo a energía.

Especialistas advierten que el problema se debe a la falta de coordinación entre los tres niveles de gobierno y la iniciativa privada, lo que ha impedido un crecimiento ordenado de la infraestructura.

Mientras algunos usuarios optan por instalar cargadores en sus hogares, el gobierno estatal ha anunciado la ampliación de puntos de recarga en zonas estratégicas. Sin embargo, el despliegue sigue siendo limitado y depende en gran medida del sector privado.