El exministro de Transporte de Rusia, Roman Starovoit, fue encontrado muerto este lunes en las afueras de Moscú, pocas horas después de haber sido destituido de su cargo por el presidente Vladimir Putin. Las autoridades rusas investigan el caso como un posible suicidio, luego de hallar su cuerpo dentro de un vehículo, con una herida de bala y un arma a su lado.

Starovoit, de 53 años, había asumido el cargo en mayo tras desempeñarse como gobernador de la región de Kursk. Su despido se dio sin explicación oficial, aunque medios locales apuntan a una posible conexión con investigaciones por presunta corrupción en obras de defensa durante su administración regional. Su sucesor en Kursk fue arrestado en abril bajo cargos similares.

El Kremlin designó a Andrei Nikitin como ministro interino del Transporte. Mientras tanto, la muerte de Starovoit se suma a una serie de fallecimientos recientes de altos funcionarios rusos, en un contexto marcado por tensiones políticas internas y el impacto de la guerra en Ucrania, especialmente tras los recientes ataques con drones a infraestructuras clave del país.