
Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, detalló acerca de la posibilidad de que su administración denuncie a quien resulte responsable por el fallecimiento de Jaime Alanís García, migrante mexicano que murió mientras trataba de huir de una redada del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de los Estados Unidos.
“Es muy lamentable que eso ocurra. Toda nuestra solidaridad y apoyo a la familia. No puede haber otro caso como este; por eso debe ponerse la denuncia en los tribunales allá”, declaró este martes 15 de julio ante medios de comunicación. Sheinbaum aseguró que el gobierno mexicano no permitirá que situaciones como esta queden impunes, y reiteró que es necesario tomar acciones concretas para proteger a la comunidad migrante en Estados Unidos.
Jaime Alanís García tenía 56 años y era originario del municipio de Zinapécuaro, Michoacán. Vivía y trabajaba en California como agricultor en una granja propiedad de la empresa Glass House Farms, dedicada al cultivo y comercialización de cannabis. El pasado 10 de julio, agentes del ICE realizaron una redada en las instalaciones de la granja donde laboraba el mexicano. Al percatarse del operativo, Alanís intentó esconderse subiendo al techo de uno de los invernaderos, ubicado a una altura aproximada de 30 metros.
Desafortunadamente, cayó desde esa altura, sufriendo lesiones de gravedad. Fue trasladado a un hospital, donde fue diagnosticado con muerte cerebral. Dos días después, el 12 de julio, los médicos confirmaron su fallecimiento tras ser desconectado del soporte vital.
El caso ha generado indignación tanto en México como en comunidades migrantes en Estados Unidos, quienes han denunciado el clima de persecución que enfrentan los trabajadores indocumentados. La presidenta Sheinbaum reafirmó su compromiso con la defensa de los derechos humanos de los connacionales en el extranjero, y afirmó que el gobierno mexicano dará acompañamiento legal y consular a la familia de Alanís García.